El downsizing es un principio que consiste en reducir la cilindrada de un motor aumentando al mismo tiempo su potencia principalmente gracias a la inyección directa y al turbo.
Una solución para disminuir el consumo y las emisiones de CO2 sin perder prestaciones.
El principio del downsizing consiste en reducir la cilindrada de un motor aumentando al mismo tiempo su potencia específica con el fin de reducir el consumo de carburante y por ello las emisiones de CO2.
Inyección directa y turbo: la piedra angular de esta tecnología. La inyección directa permite una pulverización homogénea y precisa de la mezcla aire-carburante en la cámara de combustión, en beneficio del rendimiento del motor. El turbo permite por su parte ofrecer una curva de potencia lineal, sin agujeros en la aceleración.